sábado, 8 de agosto de 2009

La sonrisa de Pi

Quisque se sorprende cuando alguien le dice que la vida no es exacta como las matemáticas. Concretamente se sorprente ante: "La vida no son matemáticas, Quisque", dicho con un tono burlón. Dentro de su ignorancia, Quisque busca la exactitud del número Pi y se pierde en la infinitud de sus decimales. La circunferencia es, por tanto, tan precisa como Pi, pero a las pelotas de tenis no se les escapa el aire de su interior. Quisque pasea por esa precisa inexactitud y piensa que la vida es un continuo caos que los matemáticos intentan comprender de una manera más o menos concreta. Después exhala tranquilo el aire de sus pulmones al aumentar la presión en su caja torácica

2 comentarios:

  1. Me gusta ver cómo Quisque, emancipado, prosigue sus andanzas por el mundo. Le seguiré la pista.

    Un abrazo.

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  2. Qué placer que te hayas pasado por aquí. Es como si el padre de Quisque le estuviese tocando el hombro al personaje.
    Muchas gracias maestro.

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